No hay nada mejor que tener un bebé, cuidarlo, amamantarlo y darle una excelente crianza, al menos de esta manera piensan muchas mujeres.
Te decimos eso porque el tema que abordaremos el día de hoy será uno que está bastante relacionado con los bebés y la lactancia, sobre todo esta última, ya que es propenso que las madres sufran de sequedad vaginal en la lactancia.
La sequedad vaginal es una de las afecciones o enfermedades más comunes que se le suelen presentar a las mujeres durante gran parte de sus vidas, más que todo cuando estas están próximas a cumplir los 40 o 50 años, durante la menopausia, pero no solo en esa etapa, sino también en el período lactante. Por eso, te brindaremos un artículo con contenido valioso que deberás leer.
Si eres menor de edad o una adolescente, créeme que este post te servirá de mucho para que comprendas los cambios a los cuales se ve sometido tu organismo con los diferentes trastornos que posiblemente padezcas a lo largo de tu vida. Así, de esta manera, podrás estar atenta y pendiente a cualquier mínimo síntoma que presientas para combatir la sequedad vaginal y demás.
El dolor del parto es casi inexplicable, es extremadamente doloroso y muchas mujeres se han dado a la tarea de dar a luz naturalmente, o bueno, por cesárea, también. A lo que vamos con todo esto es que si el parto te genera severas molestias, es probable que sufras también las consecuencias de este, que probablemente se vean traducidas en una sequedad vaginal.
Si hay algo que asemeja a la lactancia, es la menopausia, ya que esta provoca una situación hormonal muy parecida. En ambas etapas de tu vida notarás un descenso abrupto de los niveles de estrógenos en tu cuerpo, lo que genera distintas molestias vaginales, siendo la falta de lubricación y el constante dolor durante las relaciones sexuales, sus principales síntomas.
Una de las cosas más importantes que debemos resaltar o subrayar por ante cualquier cosa, es que las madres en período de lactancia no pueden dar uso de la terapia hormonal, ya que sufrirás las contraindicaciones de este método, sin embargo, sí puedes emplear otras alternativas, tales como la aplicación de hidrantes o lubricantes, que claramente aliviarán el dolor.
Es totalmente normal que los síntomas de la sequedad vaginal durante la lactancia, desaparezcan una vez dejes de amamantar a tu bebé, así que tampoco es que padecerás por mucho tiempo de esa molestia afección que tanto afecta a gran parte de las mujeres a nivel mundial. En este artículo, responderemos todas tus inquietudes referentes a este tema. ¡Sígueme!
Sequedad vaginal durante la lactancia
Como ya te hemos comentado anteriormente, la sequedad vaginal es una de las afecciones más comunes de las que padecen las mujeres en etapa de lactancia, ya que cualquier estado o trastorno que implique una ligera o gran disminución de las hormonas femeninas, ve afectada deliberadamente la lubricación en las paredes o tejidos vaginales.
Es totalmente normal que durante la lactancia, haya ciertas liberaciones de oxitocina y prolactina, esto desencadena que haya un descenso considerable de los estrógenos, por lo cual todo esto trae consigo problemas en la lubricación de la vagina, al igual que dolores en el coito durante las relaciones sexuales. Así, por lo menos, lo han explicado muchísimos médicos.
Sí, suena un poco descabellado y hasta irónico, pero todo se debe a que durante el embarazo la producción de hormonas femeninas –estrógenos- se ve aumentada en cantidades industriales, pero luego, una vez llega el parto, la concentración o producción de dichas hormonas, disminuye bruscamente, porque la mujer lactante se ve en una situación similar a las de la menopausia.
Por si no sabías, la vagina, ese aparato genital de la mujer, es el órgano donde hay mayor concentración de los denominados receptores estrogénicos de todo el organismo, por eso, es muy sensible y delicado a cualquier tipo de variación de los estrógenos. De esta manera, cuando estos descienden, los tejidos vaginales adelgazan produce un incremento de la sensibilidad.
Es muy importante que sepas todo esto, ya que además de lo anteriormente explicado, los niveles de estrógenos influyen mucho en las condiciones de la humedad, el pH y la composición del flujo vaginal, como también en la circulación de la sangre sobre la vagina. Todo esto conlleva a que haya una menor secreción vaginal, lo cual desemboca en sequedad e infecciones.
Cómo evitar la sequedad vaginal durante la lactancia
Claro, y es que teníamos que brindarte una sección donde te demos tips o consejos acerca de cómo evitar o mejorar la sequedad vaginal durante la lactancia, justo ese período donde debes amamantar a tu bebé. Primero que nada, debes tener muy buenos y limpios hábitos vaginales. Ir al baño correctamente, hacer ejercicios de suelo pélvico y mantener actividad sexual.
El consumir abundantes líquidos te ayudará a estar bien hidratada, y esto te brindará una mayor lubricación natural a tu aparato genital. Otro detalle que no debes dejar escapar es la ducha al menos una vez al día con geles de pH neutro, pero no abuses, ya que el exceso de higiene, puede generar zozobra en el pH vaginal. Evita labor tu vagina con jabón, y más con geles.
¿El escozor y la intensa picazón no te dejan en paz? En este caso, es mejor que apliques el método del “baño de asiento”, el cual consiste en lavarte con agua tibia y sin jabón, pero sí podrás agregarle una pizca de sal al líquido para que esta te ayude a aliviar los síntomas. Verás, que con el transcurrir de los minutos, te sentirás mucho mejor.
Una alternativa diferente es el tomar alimentos probióticos, ya que estos mejoran y elevan los niveles de la flora vaginal. Con respecto a la eliminación de alimentos y demás elementos, es recomendable que elimines de tus comidas los picantes. No es menos importante, pero el equilibrio emocional es vital, así que evita el estrés para que la lubricación natura no se vea afectada.
Si hay productos farmacológicos que alteran el pH de la vagina, son las conocidas compresas y los tampones, así que no abuses de su uso a diario, ya que te causarán mayor irritación y favorecerá negativamente la aparición de hongos e infecciones. A parte de esto, utiliza prendas cómodas de algodón que no ajusten mucho a tu cuerpo. Contrarrestará la picazón y el escozor.
Para finalizar, esperamos que toda esta información te haya sido útil para comprender un poco más acerca del complejo mundo de las mujeres, ya que ser una no es nada fácil. Si te gustó el artículo, no dudes un segundo en compartirlo en tus redes sociales para que muchas otras puedan ojearlo.
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